Vivir en Curacaví se está transformando en la experiencia de un círculo vicioso. A mi me parece que hay solución, pero desde las lecturas de los muros de Facebook, los comentarios que me hacen los vecinos (algunos incluso muy enojados) y el tipo de respuesta de las autoridades (en ocasiones, con una encogida de hombros), todo el paraje se aprecia de malo a peor.
Yo no soy más que un concejal que está terminando el período que se gano (con sudor y mucho trabajo de parte de los compañeros) de nuestra querida María Recabarren Rojas y mi actividad laboral es la de «maestro de construcción». Me parece que no necesito más para entender una ecuación simple: Curacaví ha crecido mucho en el número de habitantes, casi se ha duplicado en 20 años. Ello trae consigo lo que una economista, asesora de mi equipo (lo dice ella con una especie de orgullo): las externalidades negativas: más personas viviendo en Curacavi han densificado el casco urbano, demandan atención por parte del Hospital, deben viajar a sus lugares de trabajo, cosa que por lo general es en Santiago (no en vano se considera a Curacavi un pueblo dormitorio), la cantidad de basura que se produce también crece, los arriendos de las viviendas experimentan un alza. Otras situaciones también pasan. Me lo comentó Sergio Dinamarca, otro colaborador, de la siguiente manera: «es deficiente; sobretodo las horas punta donde más de un pasajero se va de pie.. Hace poco hubo un accidente en una empresa de buses (no recuerdo la empresa) y un pasajero que se encontraba en la cabina sufrió un accidente. Ya hay muchas señales que el sistema de transporte está fallando; ojalá no se espera a que tengamos una tragedia”. La ocurrencia de una tragedia pareciera ser la muerte de una crónica muy anunciada.
Lo que yo hecho de menos es una visión sobre el Curacaví que queremos y eso es tarea de los vecinos. Sin duda que las autoridades (de todo tipo) no están ajenas a esto, pero si hay una ciudadanía chupándose el dedo, apuesto a que las autoridades no harán más que: observar cómo se chupan el dedo.
Últimamente las malas experiencias y el pésimo trato que se sufre en el traslado de personas Stgo-Cvi, ida y vuelta, está por sobrepasar los límites de la paciencia y a mi me parece que la hora de una gran protesta por esto ya llego. No se trata de lo que a mi me parezca, por cierto, sino de la manera lenta lentísima, burocrática, de dejar que las cosas sigan sucediendo por parte de las autoridades y en este caso, como se trata de transporte, me refiero a las autoridades de transporte.
Un ejemplo de lo anterior es el Seremi de Transporte Matias Salazar Zegers. Participó con él María Recabarren y Paul Alvarado para sondear una extensión del Transantiago hasta Curacavi, mediante una zonificación en la tarifa del pasaje. Les dijeron que lo olvidaran. Luego como presidente de la Comisión de Transporte del Concejo, acordamos con el Seremi mediante el subsidio al transporte rural en su modalidad de zonas aisladas, un estudio para poder licitar una línea entre El Ajeal y Curacavi. A este proceso se unió Roberto Trincado por Encuentro Ciudadano y Cristian Galdames, concejal PS. Nos dijeron que a más tardar en enero del 2016 se estaba en condiciones de tener todo listo para empezar a operar en marzo. A la fecha, nada.
En la seremia se conocen la ley al revés y al derecho, pero también saben cuáles son sus limitaciones; sus realidades a la hora de fiscalizar y es acá cuando la respuesta disfrazada en una encogida de hombros adquiere notoriedad.
Si las personas afectadas en Curacavi por el tipo de transporte (que también conozco como usuario) están con el problema hasta las narices y desean meter ruido con alguna acción notoria, yo me sumo como uno más, como «maestro en construcción» y cuando así lo encuentren necesario citamos a la Comisión de Transporte del Concejo con la participación de l@s vecin@s.
Por si el dato sirve: todos los martes y miércoles pasan autoridades del gobierno central, rumbo a Valparaíso, al Congreso. A mi se me ocurre hacer un lienzo para colocarlo en las pasarelas. Tal vez alguien tenga una idea mejor. La cosa es pasar a la acción, a la protesta.
yo estoy puro cansado de esta mierda de transporta y tambien de las autoridades que la verdad: no son ningun brillo..
a la pelea!!.. en Til Til se toman la carretera y ahi están… creo que si no se la tomaran, estarían peor..
Ya estamos cerca de elecciones Ya para que empiezan todos con la misma cantaleta políticos todos chantas
Estoy muy de acuerdo con todo si curacavi es parte de Santiago porque no tenemos las mismas frecuencias de transporte que ellos muchas veces se queda tirado en stgo porque se pierde el ultimo bus y resulta que mucha gente de nuestra comuna trabaja y estudia en stgo