Según datos de un informe reciente, los soldados de Israel han matado a 41 niños palestinos en el territorio de Cisjordania, Jerusalén y en la Franja de Gaza desde el pasado 1 de octubre, informa Global Research. La cifra incluye a 31 palestinos menores de 18 años que fueron acusados por las fuerzas israelíes de llevar cuchillos o realizar ataques con pistola, así como otros jóvenes muertos a tiros durante enfrentamientos.
Según indica la organización de defensa de los niños Defense for Children International las autoridades de Israel también rechazaron las solicitudes de los familiares de las víctimas de realizar autopsias.
La organización también criticó fuertemente la política de Tel Aviv, que aplica el principio de ‘disparar a matar’ contra los niños palestinos.
«De acuerdo con el derecho internacional, el uso excesivo de la fuerza es admisible solo en caso de peligro inminente o para prevenir un delito grave que pueda causar la muerte o daños graves», destaca la organización, y llama la atención de la ONU a esforzarse para evitar que Israel emplee armas de fuego contra niños.
La ONU ha criticado en varias ocasiones a las autoridades del país por el uso excesivo de la fuerza contra los palestinos.
Por otro lado, prosiguiendo con su sistemática intervención de limpieza étnica, se constata un «Récord de demoliciones y desplazamientos» por parte de Israel, que destruye decenas de hogares palestinos.
Los servicios especiales de Israel han demolido en lo que va de año al menos 41 edificios de palestinos en Cisjordania. Se trata de una escuela primaria y decenas de hogares, lo que corresponde al nivel máximo de desalojamientos forzosos perpetrados por Israel desde el año 2009, según un reporte de la ONU publicado el 4 de marzo de 2016.
Paralelamente, se destaca además la política de desplazamiento por parte del estado de Isreal contra la población palestina, a la que la ONU se ha referido como la mayor ola de desalojos desde 2009.
Los servicios especiales de Israel han demolido en lo que va de año al menos 41 edificios de palestinos en Cisjordania. Se trata de una escuela primaria y decenas de hogares, lo que corresponde al nivel máximo de desalojamientos forzosos perpetrados por Israel desde el año 2009, según un reporte de la ONU publicado el 4 de marzo de 2016.
Durante la última demolición ejecutada por la administración civil israelí en la localidad de Khirbet Tana, en las afueras de la ciudad de Nablus, fueron «desplazados 36 miembros de diez familias, entre ellos 11 niños, y resultaron afectados los medios de vida de cinco familias más», comunica la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés).
Doce de los edificios destruidos pertenecían a las autoridades palestinas y la Media Luna Roja palestina. «Estas estructuras fueron demolidas o dañadas por las fuerzas israelíes debido a que carecían de permisos de construcción, que en Khirbet Tana, situado en una zona militar cerrada, son concedidos por Israel», explicó la OCHA en Facebook.
Las autoridades israelíes se niegan a conceder permisos de construcción en la región debido a su cercanía a la «zona de fuego». Según la ONU, alrededor del 18% del territorio de Cisjordania es considerado por Israel como no apto para la construcción de instalaciones permanentes, lo que afecta a 38 comunidades palestinas.
En el 2014 Israel expulsó a palestinos beduinos de la comunidad Khan al-Ahmar, quienes denunciaron el plan del régimen israelí de expulsar a 12 mil palestinos y reubicarlos en otra zona de Cisjordania con el propósito de ampliar sus colonias hacia el este.
Beduinos de la comunidad Khan al-Ahmar denunciaron el plan del régimen israelí de expulsar a 12 mil palestinos y reubicarlos en otra zona de Cisjordania con el propósito de ampliar sus colonias hacia el este.
La ocupación por parte de Israel en Palestina trae consecuencias de muerte incluso cuando no se está en una operación. Fue el caso en febrero del 2012 de diez niños palestinos que murieron y 20 resultaron heridos cuando un camión israelí que trasladaba un tanque de combustible chocó contra un autobús escolar que transportaba niños de un jardín infantil cerca del puesto de control de Qalandia, en Ramallah, según consigna. Israelíes en Facebook celebraron la muerte de los niños palestinos, escribiendo declaraciones despectivas sobre un muro de una columna de noticias sobre el accidente. Los comentarios israelíes han ido en aumento en Twitter, espantando a los usuarios por el nivel de racismo y odio dirigido hacia los niños palestinos fallecidos.
Fuente: RT © Organización Autónoma sin Fines de Lucro «TV-Novosti»
