Sesión de Concejo a las pailas…

Para Curacaví Digital y Periódico Cuarto Poder

La Sesión del Concejo del lunes 05 de octubre se fue “a las pailas”. Es decir: el Concejo, que incluye a los 6 concejales, al alcalde y que cuenta con un Ministro de Fe, más dos funcionarias que toman apuntes y dejan por escrito los “Acuerdos del Concejo”, tuvieron un comportamiento dispar, más curioso que sorpresivo.

A la Sesión no llegó el alcalde Juan Pablo Barros Basso, ni sus concejales “a toda prueba”, Sandra Ponce por Renovación Nacional y Marco Guzmán, de la UDI, todos pertenecientes ahora al novísimo invento de la derecha caratulado como “Chile Vamos”, cuyo logo ya ha sido noticia al recibir la acusación de plagio.

Tampoco llegó el Secretario Municipal y Ministro de Fe del Concejo, don Juan Ricardo Garrido Lizana, ni se presentó la Secretaria de Actas, Sra Isabel Melendez. Los que si estaban puntual fueron los concejales Lidia Araos de la UDI, Cristian Galdames del Partido Socialista, Paul Alvarado de la Democracia Cristiana y Francisco Carrasco del Partido Comunista. Las Sesiones del Concejo son citadas a las 16:00 hrs y cuenta con un segundo llamado a las 16:15.

Normalmente los miembros del Concejo reciben los días viernes anteriores a la Sesión una Tabla con el contenido, resumida. Según confirman algunos concejales, es costumbre que el mismo día del Concejo e incluso en ocasiones, en momentos previos, llegue una Tabla más completa, lo que en muchas ocasiones causa sorpresa.

Cumplido el tiempo del segundo llamado y no habiendo recibido las carpetas, ni contando con la presencia del Ministro de Fe, ni de la Secretaria de Actas, los concejales presentes encargan al concejal Francisco Carrasco que, de alguna manera (y si ello no es posible: de cualquier manera) encuentre al Ministro de Fe para dejar constancia de la presencia de ellos, así como de la imposibilidad de no sesionar por la falta de las carpetas y la ausencia de la Secretaria de Actas. En rigor, si bien es deseable que estén todos presentes, habiendo carpetas, secretaria de Actas y Ministro de Fe, más la cantidad mínima de miembros del Concejo que hacen Quorum, se sesiona.

El concejal Cristian Galdames comenta para Curacaví Digital que “esta fue la gota que rebalsa el vaso y que se ha transformado en una costumbre: la entrega de carpetas a última hora, retrasos no avisados, etc”. “Acá se constata una falta de respeto permanente no solo a Cristian Galdames, sino que a un representante de la ciudadanía”.

Por su parte Paul Alvarado afirma que “no avisaron sobre un retraso. Es costumbre avisar. A mi me pasa que debido a mi estudio y práctica profesional, me ha sido complejo llegar a las 16:00, pero siempre aviso y estoy presente para el segundo llamado”. “Que no haya habido carpetas, ni Ministro de Fe, ni personas en la secretaria de actas, agrava el asunto”. “Antes de emitir una opinión, desearía primero escuchar las explicaciones de la primera autoridad comunal”. Afirmó también sentirse muy molesto por todo el bochorno.

La concejala Lidia Araos confirma la versión de sus colegas y añade: “el Ministro de Fe solo llegó después que el concejal Francisco Carrasco lo fuera a buscar a su oficina, alrededor de las 16:23 hrs y además llega sin las carpetas correspondientes para iniciar la Sesión, ya que con los 4 concejales presentes se podría haber sesionado; lo que nos imposibilitó sesionar”. “Esto no solo es una falta de respeto como concejales, sino que a la ciudadanía que confió en nosotros, como una manera de llevar sus problemas al Concejo. Casi siempre son cosas que se pueden resolver. Ahora tendrán que esperar una semana más”. “Imagínese, en mi caso tenía muchas cosas importantes que poner sobre la mesa y esto nos entrega gratuitamente una mala imagen, en momentos en que la política está tan desprestigiada, se arma este tremendo show, perjudicándonos aun más. Lo que más me decepciona es que los ausentes son partidarios de mi sector político, en este caso la UDI y RN. No solo me voy con las manos vacías, sino que con una respuesta penosa porque yo voy a contar las cosas exactamente como ocurrieron”. “Además había una vecina presente que solicitó Audiencia Pública. Ella tuvo que pedir permiso en su trabajo, finalmente para nada”. «Esta forma de trabajo excluyente deja a los vecinos a la deriva; pero pese a esto yo voy a continuar con mi labor y cumpliendo mi deber con más fuerza que nunca, porque encuentro que esta forma de gobernar una comuna es simplemente reprochable”.

Francisco Carrasco comenta que se pudo haber sesionado, pero al no haber carpetas, ni Ministro de Fe, ni Secretaria de Actas, se optó por suspender la Sesión y que la presencia fuera de plazo del Sr. Garrido solo fue para constatar que habíamos 4 concejales. En rigor 3, porque cuando llego el Secretario Municipal, el concejal Galdames se retiró indignado por considerar lo que consideramos todos: una falta de respeto que lamentablemente es una constante. Por la competencia y poder que tiene un alcalde él determina la Tabla – es el que pone la música y decide el volumen de esta- y quizá la única parte de la Sesión donde los concejales pueden meter la cuchara es en los Puntos Varios. Ese es el poquito espacio de incidencia que tenemos y los vecinos cuando nos encargan algo, después nos preguntan. Todos los concejales hacemos eso. Algunos solo hacen eso. Otros hacemos cosas diferentes, que nos demandan mucho tiempo y además llevamos las demandas o solicitudes de los vecinos que casi siempre guardan relación con casos sociales o aspectos de fácil solución. Muchas veces hay que insistir en aquello. El Municipio -y si esta administración fuera más empática o inclusiva- debiera entender que le conviene esta función de los concejales porque somos como “sensores” de lo que pasa en Curacavi. Pero pareciera que ello no tiene importancia”.

Francisco Carrasco precisa que una vez comisionado por sus colegas para ir en búsqueda del Sr Garrido Lizana, se encuentra con él a la salida del Departamento de Finanzas. Allí el concejal por el PC le pregunta derechamente si la Sesión del Concejo se va a realizar o no y Garrido Lizana le comenta “que hay un retraso debido a que en el municipio se encuentra un conocido actor de telenovelas y el alcalde está con él”, presumiblemente sacándose algunas fotos.

Fuera de la falta de respeto, el desorden evidente a la hora de preparar una Sesión de Concejo, la desconsideración hacia quienes estaban presentes, la práctica del silencio al no entregar ninguna explicación (recordemos que este es un municipio chico donde las personas se conocen y el Concejo sesiona a pocos metros de donde está la Secretaria de Actas y el Secretario Municipal) y la frivolidad (preferir fotos con actor de telenovelas a cumplir con el deber), lo que se evidencia es que ésta es la forma de ser del alcalde y su modus operandi no es una curiosidad que cause sorpresa, sino que su manera de relacionarse con los demás. Los concejales Galdames, Alvarado, Araos y Carrasco además puntualizan que en el primer Concejo de cada mes se otorgan las Audiencias Públicas. Es tal vez la única oportunidad que los vecinos tienen para plantear sus problemas de manera directa, o sugerencias o ideas para una mejor comuna. Este lunes era el caso y la vecina Vivian Simpson estaba presente a la espera de su turno para exponer. Ella hizo llegar debidamente una email al alcalde, con copia a los concejales sobre el motivo de su intervención. Sin embargo no estaba considerada en la Tabla, lo que resulta aun más curioso.

Consultado sobre este bochorno, los concejales ausentes Ponce y Guzman entregaron a Curacaví Digital sus respectivas versiones de lo sucedido.

Sandra Ponce: “llegamos 5 minutos tarde después del segundo llamado. Creo que faltó voluntad”.

Marco Guzman apunta a lo mismo respecto de coincidir en que solo fueron 5 minutos de tardanza en relación al segundo llamado y que los “colegas presentes simplemente no quisieron esperar. Me llamó la atención porque en otras oportunidades hemos esperado hasta 30 minutos. Yo creo que están muy sensibles y que les faltó madurez y tolerancia”.

Cabe señalar que ninguno de ellos se refirió al motivo exacto por el que se produjo esta situación y que consultada la Sra Isabel Meléndez por la no entrega oportuna de las carpetas, ella se excusa de responder y deriva la pregunta al Sr. Garrido Lizana, quien termina diciendo: “las carpetas no se entregaron a tiempo porque estaba el concejal Alvarado con la Sra Meléndez sacando fotocopias”. Consultado al teléfono el concejal Alvarado para precisar esta diferencia milimétrica que lo sitúa como, a lo menos “responsable adjunto” del bochorno, suelta una carcajada y acota: “prefiero referirme sobre esta respuesta del Secretario Municipal y Ministro de Fe del Concejo, Sr. Ricardo Garrido en Sesión del Concejo”.

A los correos de los concejales llegó después un email de parte del Secretario Municipal donde se constata la no realización de la Sesión y se adjunto la Tabla, para variar, mucho más extensa que la distribuida el día viernes anterior. Para el caso de las Audiencias Públicas en esta ocasión está inscrita la vecina Andrea Valladares Barrera, del sector de Antequiles para exponer la situación que afecta a la directiva de su junta de vecinos que le impide postular a la subvención municipal para llevar a efecto las actividades de navidad con los niños del sector. La vecina Vivian Simpson, que estuvo presente en la fallida Sesión del Concejo y debió solicitar un permiso laborar para estar presente, tampoco fue incluida.